Manual Para Idiots: NO kiero ser Ma.


Sinopsis


Si alguna vez hiciste las siguientes preguntas: 

“¿Cómo no vas a querer si sos mujer?”

“¿Quién te va a cuidar cuando seas vieja?”

Tus quebrantos arcaicos han sido escuchados y por ello; he aquí las respuestas a tus perspicaces dudas, de la mano de la creadora de 
"La semana del Gameto Femenino" y del fracaso rotundo, no discutido; de la semana de "La Segregación de Dopamina en el Hipotálamo"; llega a ti, personaje antiquísimo de los siglos medievales, el manual que disipará tus inquietudes sobre la elección y decisión personal de cada mujer: Manual para Idiots: No Kiero ser Ma. 

Porque tu inquietudes sobre la vida de otra persona es muy importante para el avance de la humanidad, las respuestas a los cuestionamientos que no te dejan dormir han llegado a ti en forma de martillo, disfrazado de blog; dispuesto a partirte a cabeza, para llenarla de información nueva, claro está.


                                Tomo I



                                   Prologo



Cuando tenía 14 años de edad, era la mayor de todos mis primos. Todos íbamos a la misma escuela y nos movilizábamos a través del mismo medio de transporte.

Un día, el más pequeños de todos (preescolar-cinco años de edad aproximadamente) no se encontraba dentro de transporte escolar a la hora indicada… recuerdo que la señora que conducía el bus me dio un sermón de: “Cómo no vas a saber dónde se encuentra tu primo… sos la mayor… sos la responsable de él” y en este punto yo me confundí. ¿Yo soy responsable de él? ¿Desde cuándo? A parecer era una regla implícita que nadie se ofreció a aclararme. No era responsable ni de mi misma y querían que cuidara de un pequeño. Literalmente no sabía qué hacer. Estaba en pánico…

Bajé del autobús y fui hasta su aula en búsqueda de su persona, me encontré con mi pequeño primo (hoy tiene 18 años de edad) sentado, medio desorientado y quieto… demasiado quieto.

Cuando lo descubrí sentado dentro de su aula le bombardee con preguntas que no fueron respondidas. También le dije que viniera conmigo, ya que debíamos irnos a casa pero no se inmuto. Yo continuaba confundida y sin saber qué hacer. ¿Qué le sucedía? No lograba descifrar su rostro; parecía perturbado, quizás triste o algo avergonzado, el punto era que se escuchaba la bocina de nuestro transporte en señal de que nos diéramos prisa.

Volví a preguntarle qué le sucedía, y con una señal no muy clara entendí lo que le había sucedido. Se había cagado encima. Intento ir al baño pero no le atino al inodoro. Yo tampoco pude procesar esa imagen… Volví a entrar en pánico.

Pude leer en su carita que deseaba con su alma que su mamá estuviera presente, que estuviera ahí… y la verdad es que yo también deseaba lo mismo.

Esa experiencia fue rotunda para afianzar mi convicción interior de que no quería ser mama… de que en realidad no tenía pasta para serlo y que no tenía la mínima intención de intentarlo “aunque sea una vez”.

Limpiar la cagada de alguien más (literal y en todos los demás sentidos de la expresión), no era una acción factible de realizar para mí en ese entonces y sigue siendo de esa manera ahora.







                        Manual Para Idiots
                                  Tomo I
                          No kiero ser Ma.






Me di cuenta que me faltaba ese “coso de la maternidad “incluso antes de los 14 años, el solo hecho de imaginarme casada y con hijos me deprimía, cuestionamientos e ideales referentes a esos temas solo lo intercambiaba con mi amiga en ese entonces.

No hasta hace cuestión de cinco años atrás que pude comprender que vivía sometida a prejuicios insanos… en realidad siempre imaginé que mi DEBER como mujer (para no sé quién… la familia tal vez o la sociedad en sí) era el ser Madre.

Frases como: “La mujer que no es madre no se realiza como tal” o “toda mujer nace para ser mamá” inundaban m espacio y yo consumía esas falsas afirmaciones y las asumía como verdad.

Sé que las personas se empecinan en creer que saben mejor que yo lo que debo hacer con mi vida, mi juventud, mi futuro… esto es algo común en cualquier aspecto de nuestro diario vivir. La gente entrometida siempre está presenten en cualquier círculo social al que pertenezcas, pero en verdad; quisiera que entendieran mi punto de vista y decisión… y por sobre todo, lo respetaran.


Mi Tía hace poco tiempo comento que desde temprana edad soñaba con casarse y tener hijos, que incluso sabia como debía verse su casa cuando eso ocurriera… y me parece fantástico. Yo creo que es genial que las personas tengan sueños realizables y que los cumpla tal cual y que sean felices por ello. Porque lo mejor del mundo y para el mundo, son las personas felices.

Yo soy igual que ella, pero al revés (?¡) En verdad no me sueño casada ni mucho menos con hijos. Quiero seguir viviendo sin la presión de ser responsable de otra vida. Porque seamos sinceros, una madre ni siquiera tiene derecho a morir cuando se le plazca… es decir, no puedes rendirte siquiera a una enfermedad porque sos consiente del daño que podría provocar el hecho de que no estés físicamente para tu hijo. Me explique bien, no? Es como demasiado jodida la maternidad.

Especialmente para alguien como yo que prefiere dormir por sobre cualquier otra cosa (sí, incluso la comida). Y dejando de lado los otros aspectos importantes de ser mama como el dinero, trabajo, educación y blah blah blah… quisiera que las personas comprendieran que la maternidad es algo serio, de por vida, un compromiso que no se puede romper, una responsabilidad enorme y que también es UNA DECISIÓN. El simple hecho de haber nacido mujer no me califica para ser madre.

Como toda decisión es personal y merece respeto.

Así como no me importa que tengan 20 años y tres hijos, espero que a ustedes no les importe que tenga 30 y siga sin niños. Porque la verdad es que, ni ustedes con sus críos son mi asunto y mi asunto sin críos tampoco es problema de ustedes.


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